Ilustrado Miguel Membreño presenta piezas de arte en MARTE
El pasado viernes 18 de octubre de 2019 el Ilustrador Miguel Membreño graduado de la Escuela de Diseño, llevó a cabo la presentación de sus piezas en el Museo Marte, San Salvador
El centro es como un recuerdo ilustrado, las cosas parecen flotar, los bordes se difuminan a la distancia y a pesar de ser gris, tiene mucho color al mismo tiempo.
Las historias inundan el centro a través de los monumentos, los parques, los edificios y las personas, pueden hacernos soñar con mejores épocas, pasadas y futuras. Tiene la enorme capacidad de inspirar.
“A pesar de las adversidades, la gente siempre tiene tiempo de reír y ser gentil, el humor coloquial es algo que parece estar siempre presente”
El centro no está descuidado, es que sigue en uso, las hermosas casas, edificios y negocios elegantes, ahora deterioradas por el tiempo y la naturaleza, siguen ahí, pero su uso y sentido ha cambiado. Se mantienen, se transforman, son reflejo de la construcción y reconstrucción de nuestra historia e identidad; El centro es un ser vivo que se adapta y evoluciona.
La humanidad que refleja este espacio es el interés de Miguel, pues trata de ver ” el orden en el caos”, reconociendo lo esperanzador que puede ser esto.
“Quiero tratar de plasmar el ambiente de esperanza que se percibe en el centro hoy en día, pero sin maquillar la escena, mostrando la realidad. Un mensaje positivo, pero sin cursilerías”.
Miguel comentó: “En el centro hasta el clima y los olores son diferentes de repente todo parece volverse gris, como si tuvieras un filtro en los ojos, pero al mismo tiempo todo puede comenzar a tomar color cuando inicia el atardecer”
Para Miguel el atardecer es una metafórica forma de resistencia a la muerte; vivir antes del irremediable fin. Justo antes de que todo termine el centro cobra vida; y es poético, es melancólico, es alegre, es hermoso y es el centro.
“A esa hora todos salen a tomar café y se llenan las plazas; la gente se sienta en cada lugar que pueda ser tomado como un asiento para descansar y compartir, en donde de repente se ven pasar niños jugando y corriendo usando aún los uniformes de la escuela. Incluso hay gente que vende hasta tarde, o que solo guarda y se queda en el mismo puesto, para conversar con los que llegan”
Jaime Izaguirre.
Jaime Izaguirre.
Etiqueta:Escuela de Diseño